MÁS ALLÁ DEL MAR: VERANO Y AGUA DULCE
En verano, cuando el calor aprieta, todos buscamos alguna forma de refrescarnos. Y aunque el mar Adriático — que ya sabes, tiene una temperatura perfecta en esta época — es una opción fantástica, hoy queremos hablarte de algo diferente: el agua dulce. Ríos y lagos de la región donde puedes mojar los pies, darte un buen baño y encontrar tu rincón de frescura para sobrellevar estos largos días de verano.
ESLOVENIA
Kolpa
El río Kolpa marca parte de la frontera entre Eslovenia y Croacia y es uno de los ríos más cálidos del país, ideal para nadar durante el verano. Sus aguas tranquilas y limpias lo convierten en un lugar perfecto para familias, pero también para quienes buscan aventuras suaves en kayak o padel. Además, muchas zonas junto al río tienen pequeñas playas de hierba o piedra donde puedes tumbarte a la sombra y disfrutar de la tranquilidad que lo rodea.
Soča
La Soča es, sin duda, uno de los ríos más bonitos de Europa. Con su agua turquesa casi irreal, nacida en los Alpes Julianos, es un paraíso para los amantes de la naturaleza y la aventura. Aunque sus aguas son frías incluso en verano, muchos no pueden resistirse a un chapuzón rápido (¡ideal para los días más calurosos!). Además, en sus tramos más suaves se puede practicar rafting, y en los más tranquilos, simplemente disfrutar de un entorno sacado de cuentos de hadas.
Bled
El lago Bled es probablemente el lugar más famoso de Eslovenia, y no es difícil entender por qué. Con su isla en el centro, una pequeña iglesia y un castillo medieval en lo alto de un acantilado, es como un sueño. Aunque suele estar lleno de turistas, sigue siendo un lugar mágico para nadar, alquilar una barquita o simplemente dar un paseo alrededor del lago. Al final del día, nada como probar una “kremšnita” (tarta de crema típica) frente al agua.
Bohinj
A solo media hora de Bled, el lago Bohinj ofrece una experiencia completamente diferente. Menos turístico, más salvaje y rodeado de montañas, es ideal para quienes buscan paz y naturaleza en estado puro. El agua es cristalina y perfecta para nadar, hacer padel o simplemente flotar y mirar al cielo. Desde aquí también se pueden hacer caminatas al Parque Nacional de Triglav o subir en teleférico al monte Vogel para disfrutar de unas vistas espectaculares.
CROACIA
Cetina
El río Cetina, en la región de Dalmacia, es un destino ideal para quienes quieren combinar naturaleza, aventura y frescura. Nace en lo profundo del interior croata y serpentea hasta el mar, formando gargantas, cascadas y paisajes espectaculares. Cerca de Omiš puedes practicar rafting, pero también hay zonas tranquilas para nadar, hacer kayak o simplemente sentarte a la sombra y escuchar el sonido del agua. Es un rincón verde y refrescante, perfecto para escapar del calor costero.
El ojo de dragón
También conocido como el Ojo del Dragón, el nacimiento del río Cetina es una de las maravillas escondidas de Croacia. Desde el aire parece un ojo gigante, con aguas increíblemente claras que van del azul al verde esmeralda. Aunque es posible nadar allí, ¡el agua está helada incluso en pleno agosto! Más que nada, es un lugar mágico para visitar, tomar fotos y dejarse impresionar por la naturaleza en estado puro. Un sitio que parece sacado de una leyenda.
El lago Modro
Junto a la ciudad de Imotski se encuentra el lago Modro, uno de los más curiosos de Croacia. Está ubicado dentro de un cráter natural y, en verano, cuando el nivel del agua baja, puedes incluso caminar hasta el fondo. Cuando hay suficiente agua, es un sitio muy popular entre locales para nadar y refrescarse.
Su color azul intenso cambia según la luz del día y el nivel del agua, y el entorno rocoso que lo rodea le da un aire de otro mundo.
Lagos de Bačina
Cerca de la costa, entre Split y Dubrovnik, los lagos de Bačina son un verdadero tesoro poco conocido. Se trata de un grupo de siete lagos de agua dulce, conectados entre sí y rodeados de naturaleza tranquila.
Aquí puedes nadar, hacer pádel o dar paseos en pequeñas barcas de remos tradicionales. Es una excelente parada si viajas por la costa dálmata y buscas algo menos turístico, más relajado y con ese encanto rural que cuesta encontrar en verano.
¿Prefieres el mar cristalino en vez de los ríos y lagos?
SERBIA
Lago Palić
Ubicado cerca de Subotica, en el norte de Serbia, el lago Palić ha sido un destino vacacional desde hace más de un siglo. Su paseo marítimo con arquitectura de estilo secesionista, los parques bien cuidados y las playas organizadas le dan un aire nostálgico, casi retro. En verano, las aguas del lago son perfectas para nadar o alquilar un bote a pedales. También hay bares y terrazas para tomar algo al atardecer. Es ideal para una escapada relajada, con un toque de historia y tranquilidad.
Lago veliko Gradište
Conocido como el Lago de Plata (Srebrno jezero), este lago artificial junto al Danubio es una de las joyas veraniegas del este de Serbia. Las playas bien organizadas, el agua templada y las actividades como el kayak, las bicis acuáticas o incluso paseos en barco lo convierten en un excelente destino para familias y grupos de amigos. Además, tiene un ambiente animado, pero sin agobios: chiringuitos, puestos de helado y hasta festivales locales durante el verano.
Drina
El río Drina, que marca parte de la frontera entre Serbia y Bosnia, es famoso por sus aguas verdes y su impresionante entorno montañoso. En verano, sus tramos más tranquilos son perfectos para nadar, hacer rafting ligero o simplemente dejarse llevar por el ritmo del río en una balsa. Uno de los lugares más emblemáticos es la casa solitaria en la roca en medio del río, cerca de Bajina Bašta, un símbolo de conexión entre el ser humano y la naturaleza. Aquí el agua es limpia, refrescante y rodeada de paisajes que invitan a quedarse horas.
BOSNIA
Cascada Kravica
Ubicada cerca de Ljubuški, en el sur de Bosnia y Herzegovina, la cascada Kravica es uno de los lugares más mágicos para darse un buen chapuzón. Rodeada de vegetación exuberante, esta cortina de agua de unos 25 metros de altura cae en una gran piscina natural donde está permitido nadar. En verano, el ambiente es animado, pero no agobiante, y hay zonas para sentarse, hacer picnic o tomar algo en los pequeños bares improvisados junto al agua. Un verdadero oasis natural, perfecto para escapar del calor.
Neretva
El Neretva es uno de los ríos más icónicos de la región, famoso por sus aguas color esmeralda que atraviesan paisajes espectaculares y ciudades históricas como Mostar. Aunque su corriente puede ser fuerte en ciertos tramos, también ofrece zonas tranquilas donde nadar, mojarse los pies o simplemente relajarse junto al agua. En verano, se organizan bajadas en rafting para todos los niveles, lo que lo convierte en un destino ideal tanto para aventureros como para quienes buscan calma.
Bañarse con vistas al legendario Puente Viejo de Mostar es una experiencia inolvidable. Y si tienes suerte, podrás ver a las valientes personas que se lanzan desde lo más alto del puente al río, una tradición local que sigue impresionando a todos los que pasan por allí.
Río Una
En la frontera entre Bosnia y Croacia, el río Una deslumbra con su belleza prístina. Sus cascadas – especialmente las de Štrbački Buk – son impresionantes, y aunque el agua es fresca incluso en verano, hay zonas seguras para nadar. Además, es uno de los mejores ríos de la región para hacer rafting. La Una es cristalina, rodeada de naturaleza virgen, y poco explotada turísticamente, lo que la convierte en un rincón ideal para quienes buscan algo más auténtico.
Río Tara
Conocido por formar uno de los cañones más profundos de Europa, el río Tara – en Montenegro y parte de Bosnia – es un paraíso para los amantes del rafting, pero también para los que solo quieren sumergirse en agua pura de montaña. Sus aguas frías, de color azul brillante, atraviesan paisajes impresionantes. Si bien nadar aquí es para valientes (¡la temperatura no suele superar los 12–15 °C!), la sensación de sumergirse en este entorno salvaje es única. También hay campamentos y zonas para descansar junto al río.
MONTENEGRO
Lago Skadar
El lago Skadar, el más grande de los Balcanes, se extiende entre Montenegro y Albania, rodeado de colinas, pueblos tranquilos y una naturaleza casi intacta. Es un lugar ideal para quienes buscan nadar en aguas templadas y tranquilas, lejos del bullicio. Durante el verano, sus orillas se convierten en zonas perfectas para relajarse, con playas naturales, juncos y nenúfares flotando en la superficie.
Aunque no es tan conocido como la costa, ofrece una experiencia mucho más auténtica. También hay pequeñas localidades a su alrededor donde se puede comer pescado fresco y disfrutar del ritmo pausado de la vida junto al lago.
Rio Morača
El río Morača nace en las montañas del norte de Montenegro y fluye hacia Podgorica, atravesando cañones y valles verdes. A lo largo de su recorrido, encontrarás tramos de aguas claras y frías, ideales para un chapuzón en plena naturaleza. Aunque no es un río muy conocido para el baño, en verano se forman pequeñas playas naturales donde locales y viajeros disfrutan del agua fresca y el paisaje tranquilo.
Perfecto para quienes buscan escapar del calor y conectar con la naturaleza, sin alejarse demasiado de la ciudad. También hay zonas de picnic y senderos cerca del río, ideales para pasar el día.
MACEDONIA DEL NORTE
Lago de Ohrid
Compartido entre Macedonia del Norte y Albania, el Lago de Ohrid es uno de los más antiguos y profundos de Europa, y está protegido por la UNESCO por su biodiversidad única y su valor cultural. Sus aguas son increíblemente limpias y de un tono azul cristalino, perfectas para nadar, sobre todo en los meses de verano. A lo largo de la orilla encontrarás playas tranquilas, pueblos con encanto como Ohrid o Pogradec, y rincones donde el tiempo parece haberse detenido. Es un lugar ideal para combinar naturaleza, baño y cultura, en un entorno sereno y lleno de historia.
ALBANIA
Blue Eye (Syri i Kaltër)
Ubicado en el sur de Albania, cerca de Sarandë y Gjirokastër, el Blue Eye es un manantial de agua dulce conocido por el intenso color azul de sus aguas y su gran profundidad. Rodeado de vegetación, ofrece un entorno natural agradable para una visita tranquila. Aunque el agua es muy fría durante todo el año (unos 10 °C), en verano algunos visitantes se animan a darse un breve baño. Es un buen lugar para una parada corta si estás explorando la zona, especialmente si te interesa la naturaleza y los paisajes poco intervenidos.
Pase tiempo en la naturaleza cerca de los ríos y lagos mientras visite los Balcanes.
¿Cuáles de los mencionados deberíamos incluir en su próximo viaje?
