El pastel de crema de Bled, llamado Kremšnita, es uno de los postres eslovenos más famosos y un auténtico símbolo del lago Bled. Lleva más de 60 años siendo uno de los favoritos de lugareños y visitantes, y su particularidad reside en su receta especial, ideada en 1953 por el pastelero Ištvan Lukačević en el Park Hotel de Bled. Los bollos de crema de Bled, también conocidos como’’kremšnita’’, se han convertido en un símbolo culinario protegido que mucha gente viene a probar por su sabor único y su capa crujiente.
¿Qué es la kremšnita de Bled?
La kremšnita de Bled se compone de dos capas principales:
Crema de vainilla: la rica y cremosa crema de vainilla es el núcleo de la kremšnita y le da su sabor característico. La crema es ligera, pero lo bastante espesa para mantener la forma de la rebanada.
Capa de nata: sobre la nata de vainilla se añade una capa de nata dulce montada que confiere suavidad y ligereza al postre.
Hojaldre – la base y la parte superior de la crema pastelera están hechas de hojaldre crujiente, lo que crea una gran textura y contraste con la nata. Por último, la capa superior se espolvorea con azúcar glas para darle un toque dulce adicional.
¿Quieres saber más de la comida en Eslovenia y los Balcanes? Echa un vistazo a este artículo.
El sabor único y el secreto del auténtico pastel de crema de Bled
La receta de la kremšnita de Bled es un secreto celosamente guardado. Su sabor único procede del método preciso de preparación, que se ha transmitido de generación en generación. Lukačević desarrolló el postre con el objetivo de crear una rebanada ligera y aireada que representara el lago Bled y la naturaleza pura que lo rodea.
Una de las características especiales de una auténtica kremšnita de Bled es que siempre está recién hecha, ya que solo cuando está fresca consigue el equilibrio perfecto entre el crujiente de la masa y la capa cremosa.

¿Dónde probarla?
La kremšnita más auténtica de Bled se puede degustar en el Hotel Park al lado de lago Bled, donde se preparó por primera vez. Muchos restaurantes y cafeterías de los alrededores del lago ofrecen su propia versión de la kremšnita, pero muchos creen que solo se encuentran el verdadero sabor y textura en la receta original.
¿Por qué es tan especial?
La kremšnita de Bled se ha convertido en un símbolo del lago Bled y es uno de los productos culinarios eslovenos más conocidos. Es un postre que, con su frescura y textura ligera, refleja a la perfección la belleza de Bled: sencillez, elegancia y sensación de ligereza. Además, la kremšnita está ligada a la historia y las tradiciones del lugar, lo que le confiere un valor añadido.
Si visita Bled, no se pierda la oportunidad de degustar este famoso dulce y sumergirse en la auténtica experiencia de este lugar mágico.

La primera tajada de crema dorada
En el Hotel Bled Rose se hizo una actualización moderna y prestigiosa de la clásica tajada de crema de Bled, creada especialmente para todos los amantes del lujo y la buena comida. Conocido por su estilo elegante y su enfoque innovador de la hospitalidad, el Hotel Bled Rose ha rendido homenaje al postre original con esta crema fraiche, añadiendo al mismo tiempo un toque de prestigio. La rebanada de crema dorada combina una experiencia gastronómica refinada con una tradición que gusta a visitantes de todo el mundo.
¿Qué hace especial a la crema fraiche dorada?
1. Decoración dorada – La rebanada está decorada con pan de oro comestible de 24 quilates para resaltar su prestigio y elegancia. Este elemento añade un toque de lujo y exclusividad al postre haciéndolo completamente único.
2. Receta contemporánea – Aunque se mantiene fiel a los ingredientes clásicos y a la capa plástica de nata y hojaldre, la rebanada de nata dorada incorpora algunas técnicas y enfoques modernos de preparación. Esto garantiza la máxima calidad y frescura.
3. Presentación exclusiva – Se sirve en elegantes platos con guarniciones de frambuesas frescas, fresas doradas y hojas de menta, lo que añade aún más sofisticación y encanto.
Los visitantes del Hotel Bled Rose pueden deleitarse con una crema fraiche dorada en el lujoso entorno del hotel, donde la elegancia del interior refleja el espíritu de este postre excepcional. Con vistas al lago Bled desde el restaurante del hotel y disfrutando de un trozo de crema dorada, los huéspedes experimentan la armonía perfecta entre las tradiciones clásicas de Bled y el lujo moderno.
La primera Rodaja de Crema Dorada es un postre excepcional que combina la rica herencia eslovena con un toque de prestigio moderno. Es una experiencia única que trasciende el gusto ordinario y se convierte en una verdadera atracción culinaria para todos los que quieran probar y descubrir lo mejor que Bled puede ofrecer.
Por qué no te pongas en contacto con nosotros y te llevamos a Bled a probar esta delicia especial.